11 abril, 2024 Anaísa Rodríguez
Tareck El Aissami flexibilizó las reglas de visita a las cárceles, lo que permitió que se ingresaran más bienes y servicios a estas instituciones y fomentó el establecimiento de economías ilegales dentro de las prisiones. "Los pranes, presos con mayor poder y hombres subordinados, comenzaron a cobrar un impuesto por todo lo que ingresaba a la cárcel"
El Aissami no es un desconocido. Durante las últimas dos décadas ocupó cargos de poder dentro del chavismo. El último fue el de ministro de Petróleo y vicepresidente sectorial de economía de Venezuela hasta el 20 de marzo de 2023, cuando renunció tras explotar el escándalo de la última trama de corrupción de Pdvsa.
"El árabe," como lo conocen muchos, fue un hombre de confianza del expresidente fallecido Hugo Chávez Frías. Ocupó la Vicepresidencia Ejecutiva de la República. Ministro de Industrias Básicas y exvicepresidente ejecutivo de la República. También ocupó la Gobernación del estado Aragua y fue ministro de Interior y Justicia.
Tareck Zaidan El Aissami Maddah nació el 12 de noviembre de 1974 en El Vigía, estado Mérida, en el seno de una familia de origen sirio-libanesa, que se estableció en el barrio El Carmen. El Aissami es el segundo de cinco hermanos, explica Poderopedia.
Su padre, Carlos El Aissami llegó a ser jefe de la sección venezolana del partido político Baath de Irak, el mismo de Saddam Hussein.
“Mi papá siempre militó en los part
idos de izquierda, estaba vinculado con movimientos revolucionarios. El 4 febrero de 1992 me informaron que había sido detenido y allanaron mi casa, me causó mucha preocupación, estudiaba quinto año de bachillerato”, contó en mayo de 2012 en declaraciones a Venezolana de Televisión.
Estudió Derecho y Criminología en la Universidad de Los Andes (ULA) donde se involucró con movimientos políticos de izquierda, suscribe la página de su perfil en Poderopedia.
Perteneció a la juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela.
Tras graduarse, incursionó en la administración pública como el primer jefe de la Misión Identidad, un programa de la antigua Oficina Nacional de Identificación y Extranjería creado en el 2003 bajo el gobierno de Hugo Chávez, que buscaba entregar documentos de identidad a personas en zonas apartadas.
Para 2005, participó en las elecciones parlamentarias y obtuvo una curul por el estado Mérida. Dos años más tarde, en enero de 2007, dejó su cargo para ocupar el viceministerio de Prevención y Seguridad Ciudadana. En septiembre de 2008, se convirtió en ministro de Interior y Justicia en septiembre de 2008, donde se mantuvo hasta octubre de 2012.
De acuerdo a información de Insight Crime, los cambios que se hicieron al sistema penitenciario durante su gestión propiciaron la aparición de una nueva figura de poder en las cárceles venezolanas: el “pran”.
"Tareck El Aissami flexibilizó las reglas de visita a las cárceles, lo que permitió que se ingresaran más bienes y servicios a estas instituciones y fomentó el establecimiento de economías ilegales dentro de las prisiones".
"Los pranes, presos con mayor poder y hombres subordinados, comenzaron a cobrar un impuesto por todo lo que ingresaba a la cárcel. Los negocios de comida, barberías, locales comerciales también comenzaron a pagar un impuesto al pran, que sumó cada vez más poder, hasta que trascendió a las paredes de la cárcel. Tanto hijos y esposas, como trabajadoras sexuales, drogas y alcohol, comenzaron a ingresar con mayor libertad a los recintos, y las bandas criminales establecidas en la cárcel replicaron su organización fuera de los penales".
También creó la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en 2009.
El 16 de diciembre de 2012, El Aissami se convirtió en el gobernador de Aragua. Durante su administración, la violencia en el estado se agudizó, convirtiéndolo en uno de los más inseguros del país, apuntó el medio especializado en crímenes y seguridad.
El más buscado
Las actividades delictivas de El Aissami no son una novedad. Durante años ha sido señalado de tener nexos con la delincuencia organizada, de estar inmerso en redes de narcotráfico y lavado de dinero. Lo vinculan con el extremismo islámico.
El 14 de marzo de 2015, la revista Veja publicó un reportaje basado en el testimonio de tres venezolanos muy cercanos al poder chavista que se encuentran residenciados ahora en Estados Unidos, a quienes nunca se identificaron. Indicó que se llevó a cabo una operación entre Irán, Venezuela y Argentina supervisada por El Aissami.
«Siempre de acuerdo a los venezolanos ahora radicados en Estados Unidos, el gobierno de Chávez mantenía varios negocios sucios con Irán. Estos incluían el envío de cocaína, documentos y equipos en un avión Aribus A340 que hacía la ruta Caracas-Damasco-Teherán y que funcionó entre marzo de 2007 y septiembre de 2010 bajo la supervisión del entonces ministro del Interior venezolano, Tareck El Aissami, hoy gobernador del estado de Aragua. Con la coordinación del encargado comercial de la embajada de Venezuela en Damasco, el libanés Ghazi Nasr al-Din, la droga era desembarcada en la capital siria y servía como fuente de financiamiento para el grupo terrorista Hezbollah. A su regreso la aeronave, apodada «aeroterror» por los venezolanos, traía dinero en efectivo y terroristas buscados internacionalmente con nuevos pasaportes venezolanos», suscribe el reportaje publicado por La Nación de Argentina.
El 18 de mayo de ese mismo año, The Wall Street Journal reportó sobre investigaciones adelantadas por una división élite de la Administración para el Control de Drogas (DEA) y fiscales federales en Nueva York y Miami contra funcionarios venezolanos. Otra vez salió a relucir El Aissami, «bajo sospecha» de convertir al país «en un centro global de tráfico de cocaína y lavado de dinero».
El 13 de febrero de 2017, fue sancionado por el Gobierno de Estados Unidos. Según el departamento del Tesoro, El Aissami había sido investigado durante varios años por su presunta participación en lavado de dinero y narcotráfico. Esta medida impide el uso de su visa, confisca propiedades en Estados Unidos y le prohíbe realizar transacciones financieras o comerciales con entes norteamericanos.
Precisó que El Aissami facilitó embarques de más de 1.000 kilos de drogas desde Venezuela a Estados Unidos y México.
Un informe de investigación de agentes federales estadounidenses entre los años 2009 hasta 2015 reveló el 24 de mayo de 2017 los supuestos vínculos entre el vicepresidente de la República, Tareck El Aissami, y el asesor de las FARC y narcotraficante salvadoreño, José Luis Merino, donde se asegura que hay una estructura para lavar dinero, contrabando de oro y combustible.
El 3 de noviembre de 2017, Canadá anunció que forma parte de la lista de 18 altos funcionarios venezolanos sancionados por este Estado, ya que «son responsables, o cómplices, de graves violaciones a los derechos humanos reconocidos internacionalmente, han cometido actos importantes de corrupción o han hecho ambas cosas».
El Aissami es el primero de las 10 personas más buscadas del Departamento de Seguridad de los Estados Unidos. En la ficha del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE), se le atribuyen cargos de “narcotráfico internacional”. El 7 de agosto de 2019 el gobierno de Suiza sumó a su lista de sancionados a 18 funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro, por “por violar los derechos humanos y socavar el estado de derecho y las instituciones democráticas». Entre ellos El Aissami.
Está entre los 18 funcionarios del gobierno de Maduro sancionados por la Unión Europea. Las medidas de la UE implican la prohibición de viajar a territorio comunitario y la congelación de los bienes “por haber vulnerado los principios democráticos, el estado de derecho y la democracia”. Figura entre los 25 funcionarios del gobierno de Maduro sancionados por el gobierno de Suiza el 11 de octubre de 2019. También fue sancionado por el TIAR el 3 de diciembre de 2019. Las sanciones incluyen la congelación de cuentas y la prohibición de ingresar a territorio de los países miembros del Tratado.
Sobre El Aissami también se dice que durante su periodo como gobernador de Aragua coincidió con el fortalecimiento del Tren de Aragua, algo que, según fuentes consultadas por InSight Crime, no fue coincidencia. Permitió el cierre de la estación policial del barrio San Vicente, lo que facilitó la toma de la zona por parte de la megabanda y la instalación de un centro de operaciones en el barrio. Un reporte de Transparencia Venezuela indica que El Aissami también estuvo involucrado en el traslado de prisioneros desde la cárcel de Tocorón al estado Sucre en 2018 para que el Tren se hiciera con el control de la ruta de droga.
Caída
El 20 de marzo de 2023, tres días después de la destitución y arresto de Joselit Ramírez, quien se desempeñaba como presidente de la Sunacrip, por la presunta desaparición de 3 mil millones de dólares provenientes de la venta de petróleo de Pdvsa, El Aissami renunció a su cargo de ministro. “En virtud de las investigaciones que se han iniciado sobre graves hechos de corrupción en Pdvsa, he tomado la decisión de presentar mi renuncia como ministro de Petróleo, con el propósito de apoyar, acompañar y respaldar totalmente este proceso”, escribió en X, antes Twitter.
Su imagen como político de confianza de Nicolás Maduro se desvaneció y su paradero se convirtió en un misterio. Nadie sabe el monto exacto que "se perdió" en Pdvsa. En principio se habló de más de 21 mil millones de dólares, pero no había cargos en su contra.
El imperio criminal de El Aissami se vino abajo este martes cuando Venezolana de Televisión transmitió imágenes de El Aissami en una celda esposado y después caminando por un patio escoltado por un policía con el rostro tapado.
El fiscal general, Tarek William Saab informó que también fue capturado otro exministro, Simón Zerpa, también madurista; y el empresario Samark López, a quien se le ha señalado como testaferro de El Aissami.
“La confirmación del arresto se produce tras un año sin conocerse el paradero del exministro de Petróleo, luego de que se reveló la trama de corrupción conocida como PDVSA-Cripto”, declaró a los medios Saab.
Según un reporte de El País de España, "se sabe que El Aissami estaba padeciendo una enfermedad y que había tenido trato con diplomáticos extranjeros: su paradero exacto no era ningún misterio".
Los excesos de El Aissami lo mantendrán tras las rejas donde podría enfrentar la pena máxima de 30 años de cárcel. Nada queda de uno de los pupilos favoritos de Chávez.
“Estoy absolutamente seguro de la honestidad, la transparencia y el carácter revolucionario y verdadero del ministro Tareck El Aissami”, dijo Chávez en 2012 en cadena de radio y televisión.
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