Viktor Orbán reiteró su firme oposición a que si quiera inicien las conversaciones para una posible adhesión de Ucrania a la Unión Europea (UE), calificando esto como una "mala decisión"
Al reiterar su rechazo a que Ucrania se adhiera a la Unión Europea (UE), el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, calificó a ese país vecino como uno de los más corruptos del mundo.
Una semana antes de que los líderes de la UE tomen una decisión sobre el inicio de conversaciones con Kiev para su ingreso en el bloque, Orbán reiteró su firme oposición a que si quiera inicien las conversaciones para una posible adhesión de Ucrania al bloque europeo aludiendo al tema de la corrupción.
Orbán insistió en su negativa, pese a que el pasado 6 de noviembre, la Comisión Europea recomendó la apertura de negociaciones con Ucrania para su ingreso en la Unión Europea. “Hoy es un día histórico porque hoy la Comisión Europea recomienda que el Consejo abra negociaciones de adhesión con Ucrania”, dijo en ese entonces Ursula von der Leyen, presidenta de ese organismo.
La Comisión Europea hizo la recomendación, aunque apuntó que aún quedaban reformas pendientes en materia de protección de las minorías y lucha contra la corrupción, por lo que condicionó el marco negociador a que ese país completase dichas transformaciones.
Una semana antes de que los líderes de la UE tomen una decisión sobre el inicio de conversaciones con Kiev para su ingreso en el bloque, Orbán reiteró su firme oposición a que si quiera inicien las conversaciones para una posible adhesión de Ucrania al bloque europeo aludiendo al tema de la corrupción.
"Hungría es vecina de Ucrania... sabemos exactamente lo que está pasando", dijo Orbán al diario francés Le Point en una entrevista publicada el 8 de diciembre. "Ucrania es conocida por ser uno de los países más corruptos del mundo", agregó.
Orbán fue entrevistado en París luego de asistir a una cena el 7 de diciembre con el presidente francés Emmanuel Macron, quien lanzó la invitación en un esfuerzo por convencer al líder húngaro de que acepte la adhesión de Kiev al grupo fundado hace ya 30 años.
El líder húngaro se mantuvo firme en su postura calificando como una "mala decisión" el plan de la UE de iniciar las conversaciones para la adhesión de Ucrania, pues, consideró, ese país, que actualmente enfrenta un conflicto con Rusia, no está listo para unirse a la UE.
Orbán insistió en su negativa, pese a que el pasado 6 de noviembre, la Comisión Europea recomendó la apertura de negociaciones con Ucrania para su ingreso en la Unión Europea. “Hoy es un día histórico porque hoy la Comisión Europea recomienda que el Consejo abra negociaciones de adhesión con Ucrania”, dijo en ese entonces Ursula von der Leyen, presidenta de ese organismo.
La Comisión Europea hizo la recomendación, aunque apuntó que aún quedaban reformas pendientes en materia de protección de las minorías y lucha contra la corrupción, por lo que condicionó el marco negociador a que ese país completase dichas transformaciones.
Es tal el rechazo de Orbán al ingreso de Ucrania al bloque europeo, que incluso ya ha amenazado con utilizar el poder de veto de Hungría para bloquear el desembolso de los fondos de ayuda. Insiste en que una de sus principales preocupaciones sigue siendo la "corrupción" de Ucrania.
Comentarios
Publicar un comentario