La Twitter política venezolana: entre la ira y la desinformación

 l Twitter o “X”,  más allá de ser una red social con mucha actividad en nuestro país, se ha convertido en el verdadero periódico y noticiero para un sector reducido de los venezolanos. Es un gran difusor de información permitiéndole a muchas personas expresarse libremente. Multiplicar los mensajes y saber comunicarlos efectivamente es uno de los retos de la política venezolana bajo este contexto polarizado y altamente conflictivo. Pretender reducir una realidad a una opinión de cortas líneas es observar un conflicto en dos colores, blanco y negro


13 diciembre, 2023Por Pablo Andrés Quintero M

Caracas/Foto: Archivo.- Las redes sociales son parte de nuestra vida cotidiana, se han convertido en nuestra segunda lengua y nuestro tercer brazo, la dependencia a ellas es cada vez mayor y en algunos casos ha sido problemática. A diario se suman más usuarios que consumen contenido por diferentes canales, más interlocutores, más información y más opinión. 

En Venezuela, Twitter es uno de los principales canales de información, así como también Instagram. Pero hay que tener en cuenta que estas redes no son del todo la interpretación o resultado del pensamiento racional de la gente, son una caja de resonancia emocional que opera en diferentes burbujas, unas más radicalizadas que otras y con capacidad de influencia bajo control del poder y grupos económicos. Cada opinión visceral es una percepción y la suma de muchas componen lo que conocemos como opinión mediática según el escritor y politólogo español José Luis Sampedro. 

La regla del 80/20 o principio de Pareto puede aplicarse al iceberg digital. Nos referimos a que el 80% de las consecuencias proviene del 20% de las causas y la mayor parte del tiempo los usuarios se disputan por dos cosas en la red social, atención y tiempo. A pesar de esto, son muy pocos los políticos que verdaderamente entienden cómo lograr atención y retención inmediata. Muchos ignoran el potencial de esta fórmula, así como también la influencia de las redes sociales en la construcción y fortalecimiento de las creencias, opiniones, cambios en el comportamiento y percepciones. 

Todos nos juntamos con los que se parecen a nosotros, con los seguidores. La robotización de las opiniones nos revela como estamos en diferentes burbujas informativas anclándonos así en un reduccionismo virtual con ausencia de debate y exceso de opiniones irrefutables. ¿Será Twitter un reflejo de la sociedad? Pues no. Menos del 20% son los que generan más del 80% del contenido según un estudio en Estados Unidos en el Pew Research Center. Una realidad que con lupa observamos en Venezuela. 

La twitterpolítica criolla no solo debe ser analizada en base al contenido, su origen y sus canales de distribución sino también en aquellos autores que pretenden definir hasta el más pequeño tema de conversación. Muchos buscan representar a la sociedad entera en sus opiniones llegando a la falsa conclusión de que “Mientras más retweets tenga, más personas piensan así”. 

Uno de los grandes enemigos en el país es la desinformación y la incertidumbre. No hay usuario que no haya sido víctima de una Fake News”noticia falsa. En política el uso de estas se ha ido incrementando debido a su efectividad no solo en campañas electorales sino también en gestión y comunicación política en crisis. Es importante comprender que la información no se analiza solo en su cantidad ni en sus voceros sino también en su calidad. En Venezuela la calidad informativa se ha perdido, hay mucha gente “experta” opinando sobre todo con muy poco grado de profundidad.

El Twitter o “X”,  más allá de ser una red social con mucha actividad en nuestro país, se ha convertido en el verdadero periódico y noticiero para un sector reducido de los venezolanos. Es un gran difusor de información permitiéndole a muchas personas expresarse libremente. Multiplicar los mensajes y saber comunicarlos efectivamente es uno de los retos de la política venezolana bajo este contexto polarizado y altamente conflictivo. Pretender reducir una realidad a una opinión de cortas líneas es observar un conflicto en dos colores, blanco y negro. 


Comentarios