Álex Saab relató sus "primeras torturas" en Cabo Verde y cómo fue su liberación (Portal antichavista ttps://elcooperante.com)

 El mandatario Nicolás Maduro dijo que el reciente canje de prisioneros fue de un "hombre inocente", en referencia a Saab, por un "grupo de personas convictas y confesas”.


Foto del avatar

Publicado

  

/

 



El empresario colombiano Álex Saab, quien recientemente fue liberado como parte de un canje de prisioneros entre Venezuela y Estados Unidos, fue el invitado del tercer episodio del pódcast del presidente Nicolás Maduro, donde conversaron sobre su detención en Cabo Verde y EE. UU.  

Durante su participación, Saab dijo sentirse feliz de haber regresado con su familia y a Venezuela, después de tres años detenido en el extranjero. 

"Feliz de poder seguir ayudando al país y agradecido con ustedes que no se cansaron porque era fácil cansarse. Los gobiernos de derecha acostumbran que lo primero que hacen cuando un funcionario tiene un problema es abandonarlo, pero este ha sido un gobierno leal, de convicción, humano, y por eso nunca dudé que iba a regresar", agregó. 

Aseguró que durante su detención en Cabo Verde y su posterior extradición a Estados Unidos, "sabía que tenía que resistir y tener paciencia".

"Yo sabía que tenía un gobierno que siempre iba a luchar por mi liberación. Es un ejemplo para el mundo de lo que un gobierno correcto debe hacer, porque los gobiernos cobardes lo primero que hacen es dar la espalda; los gobiernos fuertes, leales, firmes, con convicción, y que saben que están en lo correcto, acompañan. Yo siempre y mi familia nos sentimos acompañados, todo el tiempo". 

Presión internacional

En su relato, el empresario de ascendencia libanesa con nacionalidad venezolana recordó que desde el año 2011, es decir, durante la gestión de Hugo Chávez (1999-2013), se comenzó a "sentir la presión internacional contra Venezuela".

ADVERTISEMENT

"El manejo de los bancos en el exterior era muy difícil, ya empezaba a ambientarse todo el bloqueo que más adelante vendría", sostuvo. 

Acotó que tras las sanciones impuestas a Venezuela, algunos empresarios decidieron irse, mientras que otros "aceptamos el llamado del gobierno para quedarnos a luchar". 

"Yo fui uno de los que se quedó a luchar y empezamos a utilizar toda nuestra infraestructura para hacer llegar los alimentos, las medicinas y cualquier otra cosa que necesitase Venezuela".

El comienzo de una misión 

Además, Saab mencionó que en abril de 2018 fue nombrado por el gobierno de Nicolás Maduro como "enviado especial" de Venezuela con el objetivo de encargarse de "traer lo que necesitase" el país. 

Destacó que meses antes de su detención en Cabo Verde viajó a un destino que no especificó, siendo esta su primera misión como diplomático, para "buscar combustible" ante la crisis de gasolina que registraba en ese momento el país. 

"En abril (de 2020) volví a viajar buscando combustible, alimentos y medicinas", dijo. 

ADVERTISEMENT

Señaló que cuando fue detenido el 12 de junio de 2020 se encontraba en su tercera misión diplomática. 

"Normalmente, viajaba hacia el destino que iba vía Argelia, pero ese día nos negaron el permiso de aterrizaje y nos tocó buscar opciones. Me dicen los pilotos que la opción era Cabo Verde. Paramos a colocar combustible y estuve como 40 minutos en la pista, dentro del avión". 

Recordó que aquella vez se encontraba en compañía de su hijo mayor, quien se quedó atrapado en Venezuela debido a la pandemia de coronavirus. 

"Estoy hablando con él dentro del avión cuando entran unos funcionarios y de manera agresiva me preguntan mi nombre. Yo les digo que soy enviado especial de Venezuela, les doy toda la explicación, y me dicen que no les interesa y me llevan detenido”, expresó. 

Aseveró que los uniformados lo sacaron a empujones del avión hasta subirlo a un vehículo donde le "cubrieron" el rostro con una capucha. 

"Yo decía que era un error, porque ellos sabían que iba en una misión del gobierno, sabían que tenía inmunidad diplomática y pensaba que se iba a arreglar" 

Fue en un salón ubicado en el aeropuerto del país africano cuando los funcionarios le pidieron una tarjeta de crédito para "comprar una visa de entrada al país".

“Abren la maleta, agarran una tarjeta de crédito de mi esposa porque yo no tenía ninguna a nombre mío porque estaba sancionado desde el 2019 por trabajar en el sistema de alimentación de Venezuela (...) Y compran la visa de entrada al país. Eso no sirvió porque quedó el registro de la hora (en) que se hizo el pago”, indicó.

La primera noche  

Resaltó que en su primera noche detenido fue puesto en un "calabozo oscuro", donde permaneció al menos 24 horas sin alimentos ni agua. 

"A la noche siguiente llegan como a medianoche (funcionarios de Cabo Verde). Me empiezan a hablar y (a) decir que debía firmar mi extradición voluntaria a Estados Unidos", dijo. 

Destacó que su negativa causó que las autoridades caboverdianas "perdieran el control", razón por la que fue "sentado y esposado de pies y manos en una silla".

"Acuestan la silla en el piso, sacan una toalla, me la colocan en la cara y me empiezan a echar agua para que sintiera que me ahogaba. Vuelven y me sientan, me hablan y me tiran, y así me tuvieron como dos horas. Fueron las primeras torturas", relató.  

Un día después fue presentado ante una jueza. "Me dijo vas a la cárcel, más nada", recordó.  

Aseguró que primero fue recluido en una prisión ubicada en la isla de Sal, donde pasó la noche en un calabozo. Un día después, según Saab, fue llevado a una cárcel ubicada en otra isla de la región.  

"Nuevamente, me llevan a un calabozo oscuro, sin baño, sin nada, incomunicado, en las peores condiciones, con un balde para hacer las necesidades. Me abrían (la puerta) una vez al día para que botara el balde y si quería tomar agua tenía que echarlo en el mismo balde. El primer día no tomé agua, pero al segundo no hay más opción". 

Ante la falta de condiciones, Saab dio inicio a una huelga de hambre. "Mi familia logró que alguien entrara a llevarme un almuerzo. Ellos los recibían en la puerta y me lo llevaban hasta la celda".

"La comida me la tiraban en el piso, la manoseaban y tenía que estar tanteando para poder encontrar el pedazo de comida porque no se veía. Así me tuvieron un mes", indicó. 

“Amenaza de muerte” y nuevo traslado

Expresó que un día, sin especificar cuándo, un prisionero se acercó a su celda para advertirle que lo "querían matar". 

ADVERTISEMENT

"Habían pagado 100 mil dólares (...) Yo creo que lo mandaron a decírmelo porque inmediatamente un guardia me dijo que podía hablar con un abogado local y lo primero que hice fue decirle que me iban a matar, que avisara a mi familiar, que hicieran protestas (...) Todo fue intencional para poder moverme de allí; a los 30 minutos estaba, otra vez, con capucha en un avión de regreso a la primera isla donde me habían detenido", dijo. 

Fue en aquel lugar donde, afirmó, comenzaron las "torturas" presuntamente entre los meses de julio, agosto, septiembre y octubre de 2020. 

"Llegué a tener casi todo el cuerpo morado; me cortaban los brazos, pero no profundo, sino que me los dejaban en carne viva (...) Me ponían las lámparas en la cara, me echaban alcohol y agua (...) Me tumbaron tres dientes, me dieron durísimo". 

La petición de las autoridades 

Al ser consultado por el presidente Nicolás Maduro sobre cuál era el objetivo de los funcionarios, Saab aseveró que le pedían "detener la llegada de alimentos, medicina y gasolina" a Venezuela. 


"Me decían que tenía que llamar a los proveedores, decirles que no les iban a pagar, que los iban a sancionar, que tenía que dar las rutas, los nombres de las empresas, porque había que hacer colapsar al gobierno. El fin era lograr un cambio de gobierno, y así pasamos el primer mes, yo negándome, ellos presionándome", aseguró.

En octubre de ese mismo año, relató, los funcionarios "empezaron a desesperarse" porque "no había tiempo".

ADVERTISEMENT

"Me decían que iban a invadir, que necesitaban que diera unas declaraciones y Juan Guaidó iba a pedir intervención militar. Esa última sesión fue monstruosa, llegaron hasta con cámaras de filmación y maquillaje. Terminé en el piso vomitando y me dijeron que ya me iban a matar por no cooperar", sostuvo.

Señaló que en noviembre de 2020 un grupo especializado en derechos humanos asistió a la prisión en la que se encontraba para "verificar sus torturas".

"Se empezó la limpieza de daños, pero no me cambiaron las condiciones de reclusión, aunque no hubo más golpes y nunca más vi a esas personas, nunca más volvieron. Después me enteré (de) que (Donald) Trump había perdido la Presidencia". 

Casa por cárcel 

Indicó que a finales del mes de enero 2021 recibió casa por cárcel. La vivienda, de acuerdo al relato de Saab, se encontraba en una urbanización que "estaba tomada por el Ejército". 

"Había por lo menos 50 personas con capuchas, con armas, en los techos, que me rodeaban completamente. Yo estaba encerrado en un cuarto, la única diferencia es que había luz y un baño. La presión seguía, entraban a cualquier hora, me ponían el fusil en la cabeza, me decían que si me iba a ir voluntariamente a Estados Unidos, seguían con el cuento, pero no el de tortura", expuso. 

El día de su liberación 

Saab fue liberado el pasado 20 de diciembre por EE.UU., donde enfrentaba una serie de cargos por lavado de dinero, en un intercambio de prisioneros con Venezuela, que excarceló a diez estadounidenses y una veintena de presos políticos. 

ADVERTISEMENT

Relató que el 14 de diciembre pidió a sus abogados hablar con los fiscales que llevaban su casa con el objetivo de saber si "había alguna novedad". 

"Sabíamos que estaban las negociaciones en curso. Yo siempre me negué a hacerme culpable de absolutamente nada, no he cometido ningún crimen y ellos lo sabían".

Un día después, Saab recibió el perdón del presidente Joe Bien, en las que fijaron las seis condiciones que el empresario deberá respetar.

Dos días antes de su liberación, comentó, fue trasladado a una "celda especial de vidrio" que solo contaba con una "camilla".

"La temperatura era terrible, creo que (de) menos 10 grados (...) Nadie sabía qué pasaba. Estuve dos días sin comida, sin agua, sin saber qué pasaba y sin apagar la luz", acotó.

En ese lugar permaneció hasta el miércoles 20 de diciembre, cuando fue llevado al edificio de la Corte. De allí, fue trasladado hasta el aeropuerto de Miami, donde se encontró con el enviado especial de Estados Unidos, Rogers Carstens, y otros funcionarios de la Casa Blanca. 

ADVERTISEMENT

"Ya con él y su equipo el trato fue excelente. Allí me explicaron cómo iba a hacer el procedimiento del canje". 

A su llegada a San Vicente y las Granadinas, el empresario fue recibido por el presidente de la Asamblea Nacional (AN) y jefe de la delegación chavista para el diálogo, Jorge Rodríguez. 

"La verdad es que a Jorge Rodríguez y Delcy Rodríguez les tengo demasiado agradecimiento. La persistencia de ellos, de Jorge, no hay manera de agradecerla. De verdad que volví a la vida cuando lo vi, me dijo 'no te preocupes que de aquí no nos vamos sin ti'", cerró. 

Un "inocente" por "convictos y confesos"

Por su parte, Maduro dijo que el reciente canje de prisioneros fue de un "hombre inocente", en referencia a Saab, por un "grupo de personas convictas y confesas”. 

"Se dio (...) un canje de un hombre inocente, puro y valiente, por un grupo de personas convictas y confesas en crímenes contra el país. Un canje humanitario", expresó. 

Comentarios